
La Pavlova es un postre clásico de origen australiano-neozelandés. Es conocido por su base crujiente de merengue horneado con una suave capa de crema batida y una explosión de frutas frescas.
En esta versión estival, combina la dulzura del merengue y la acidez de frutas de verano. Como por ejemplo, fresas, mango, kiwi o frambuesas, con un toque gourmet: las escamas® de Sal Maldon®.
Este contraste de sabores, donde la sal marina en escamas realza la frescura de las frutas y equilibra la dulzura del conjunto, eleva el postre a una experiencia gastronómica sofisticada. Ideal para ocasiones especiales o para disfrutar en días calurosos, Ligero, colorido y sorprendente, conquistará a quien lo pruebe.
Ingredientes (para 6-8 personas)
- 4 claras de huevo
- 200 g de azúcar
- 1 cucharadita de vinagre blanco
- 1 cucharadita de maicena
- 300 ml de nata para montar
- 1 cucharada de azúcar glas
- Frutas de verano al gusto (fresas, frambuesas, arándanos, melocotón, etc.)
- Escamas de Sal Maldon
Preparación paso a paso pavlova de frutas
Sigue estos sencillos pasos para preparar esta pavlova de frutas de verano con las escamas de Sal Maldon.
- Precalienta el horno a 120 °C y forra una bandeja con papel de hornear.
- Bate las claras a punto de nieve. Cuando empiecen a montar, añade el azúcar poco a poco, sin dejar de batir, hasta obtener un merengue firme y brillante.
- Incorpora suavemente el vinagre y la maicena con movimientos envolventes.
- Coloca el merengue sobre la bandeja formando un círculo con un pequeño hueco en el centro, como un nido.
- Hornea durante 1 hora y 15 minutos. Luego apaga el horno y deja enfriar la pavlova dentro con la puerta entreabierta.
- Monta la nata con el azúcar glas hasta que esté firme, y reparte sobre la base de merengue ya fría.
- Decora con frutas frescas al gusto y, justo antes de servir, espolvorea una pizca de escamas de Sal Maldon.