La focaccia es un pan tradicional italiano que se caracteriza por su suave y esponjosa textura. Es increíblemente versátil y se puede disfrutar como acompañamiento de cualquier comida. Incluso como plato principal si se sirve con un poco de queso, embutidos o vegetales. La combinación de aceite de oliva virgen extra y romero, dos ingredientes emblemáticos de la cocina mediterránea, convierte a esta receta en una auténtica delicia que transporta a las cálidas tierras italianas con cada bocado. Además, su preparación permite personalizarla con diferentes hierbas o ingredientes, haciendo que cada focaccia sea única. Este pan es perfecto para cualquier ocasión, ya sea como aperitivo o acompañamiento en una comida más informal.
La focaccia ya es mundialmente conocida por su sabor tan especial y su agradable textura. En esta receta podrás conocer cómo hacer una focaccia con romero y aceite de oliva de manera rápida, sencilla y asegurando que sea muy deliciosa.
Método de elaboración focaccia con romero
- Pon el romero en un bol y cúbrelo con 6 cucharadas de aceite de oliva.
- Añade la harina, la levadura de acción rápida, la Sal Maldon y el aceite de oliva restante en un bol. Añade 175 ml de agua y mézclalo hasta que quede pegajoso.
- Amasa la masa pegajosa sobre una superficie ligeramente engrasada durante unos 10 minutos hasta que quede lisa y uniforme.
- Cubre y deja reposar durante una hora hasta que haya subido al doble de su tamaño.
- Prepara una bandeja de horno con papel de horno, amasa la masa hasta que adopte la forma que quieras y deja que suba otros 30 minutos.
- Calienta el horno a 200ºC, haz agujeros con el dedo y extiende por encima la mezcla de romero y aceite de oliva.
- Añade una pizca más de Sal Maldon y cocina durante 20 minutos.