Los pimientos del padrón son una tapa típica en España que estamos acostumbrados a comerla en restaurantes y bares. Sin embargo, debido a que su preparación es muy fácil y rápida es ideal para hacerla en tu casa. Solo necesitas una sartén caliente, un buen chorro de aceite de oliva y unos minutos para tener un aperitivo lleno de sabor.
Si bien los pimientos de padrón son muy versátiles y se pueden comer de diversas formas. Como en empanadas, arroz o con tempura; la receta tradicional es hacerlos fritos con un toque de sal.
En este post te explicaremos cómo hacer pimientos de padrón para que te queden en el punto perfecto. Y, claro, con el sabor distintivo de Sal Maldon.
Este tipo de sal en escamas® realza el sabor natural del pimiento sin opacarlo, aportando una textura crujiente que contrasta perfectamente con lo suave del interior del pimiento. Además, los pimientos de padrón tienen ese característico factor sorpresa. La mayoría son suaves, pero de vez en cuando aparece uno picante, lo que hace de esta tapa una experiencia divertida y deliciosa.
Modo de elaboración pimientos del padrón
A continuación, te mostramos paso a paso cómo preparar los auténticos pimientos de padrón en casa. Con pocos ingredientes y en solo unos minutos, conseguirás una tapa sabrosa, ligera y con ese toque crujiente y salado que tanto gusta. Sigue estos simples pasos y sorprende a tus invitados con un clásico de la gastronomía española.
- En un recipiente grande, se añaden los pimientos de padrón y se rocían con el aceite de oliva. Remueve los pimientos para que queden bien cubiertos por el aceite.
- Calienta una sartén o plancha a fuego medio-alto. Cuando esté caliente, fríe los pimientos durante unos minutos por cada lado. Hasta que tengan marcas negras de carbonización y se hayan ablandado.
- Una vez cocinados, pon los pimientos de padrón en un plato y espolvorea generosamente con Sal Maldon antes de servir.
