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En un recipiente grande, se añaden los pimientos de padrón y se rocían con el aceite de oliva. Remueve los pimientos para que queden bien cubiertos por el aceite.

Calienta una sartén o plancha a fuego medio-alto. Cuando esté caliente, fríe los pimientos durante unos minutos por cada lado hasta que tengan marcas negras de carbonización y se hayan ablandado.

Una vez cocinados, pon los pimientos de padrón en un plato y espolvorea generosamente con Sal Maldon antes de servir.

Las chirivías están en temporada y, aunque son deliciosas asadas con miel, saben aún mejor fritas en un buñuelo crujiente y bañadas con una salsa cremosa de yogur con hierbas, todo ello rematado con una pizca de Sal Maldon para resaltar todos los increíbles sabores.

Es una comida súper sencilla que funciona en cualquier momento del día, puede combinarse con huevos escalfados y aguacate para crear un delicioso brunch o acompañarse con algo de ensalada como una estupenda comida para llevar.

Método de elaboración:

1. Ralla las chirivías sobre un paño limpio y escúrrelas.

2. Mezcla con el resto de ingredientes.

3. Calienta un poco de aceite en una sartén y empieza a cocinar.

4. Con ayuda de una cuchara, echa la mezcla en la sartén y una vez que empiece a dorarse dale la vuelta y cocínala bien.

5. Combina todos los ingredientes de la salsa de yogur, mezcla y sirve.

Las patatas son un acompañamiento que quedan muy bien en muchos tipos de preparaciones. Pero, como en Sal Maldon nos gusta innovar y transformar la comida en platos únicos, aquí te explicamos cómo hacer una deliciosa milhojas de patata al horno con un toque de aceite de oliva y, por supuesto, acompañadas de Sal Maldon.

Método de elaboración:

  1. Si utilizas patatas más grandes, precalienta el horno a 210ºC/190°C con ventilador/posición 7; para asar patatas pequeñas, precalienta a 200ºC/180ºC con ventilador/posición 6. Pon cada patata, de una en una, en el cuenco de un cucharón de madera y haz cortes verticales a intervalos de unos 3 mm, sin llegar hasta el final, para que la patata se abra en forma de abanico.
  2. Cuando las hayas cortado todas, pon el molde en el fuego con la mantequilla y el aceite y caliéntalo hasta que empiece a burbujear. Dale la vuelta a las patatas, poniéndolas primero boca abajo (es decir, con el lado cortado hacia abajo) y después con el lado «bueno» hacia arriba, y échales la grasa por encima.
  3. Salpica bien cada patata con Sal Maldon y mételas en el horno: asa las patatas grandes durante una hora y 10 minutos aproximadamente, probando para ver si están blandas por dentro (puede que hagan falta otros 10 minutos); 40 minutos deberían ser suficiente para las patatas pequeñas.
  4. Pásalas a un plato templado y sírvelas.

Si estás buscando un snack saludable y vegano, esta es tu receta. En tan sólo 40 minutos tendrás listas tus barritas veganas de avena acompañadas de un delicioso toque de chocolate, cacahuetes, nueces, sirope de arce y, por supuesto, Sal Maldon.

  1. Engrasa la base y las paredes de un molde cuadrado de 18 cm.
  2. Cúbrelo con papel de hornear, dejando que sobresalga por los lados.
  3. Coloca los cacahuetes, el cacao, la Sal Maldon y la mitad de los copos de avena en una batidora americana y pulsa hasta que estén bien picados.
  4. Añade las pasas, el aceite, el sirope de arce y el resto de la avena. Vuelve a pulsar hasta que todo esté bien mezclado.
  5. Vierte y presiona la mezcla sobre la base de una bandeja ya preparada.
  6. Utiliza un vaso de vidrio liso para alisar la superficie.
  7. Déjalo reposar en el frigorífico durante 1 hora o hasta que quede firme.
  8. Para el relleno, mezcla el plátano, la mantequilla de cacahuete, las pasas, el aceite, el sirope de arce, la harina y la Sal Maldon, rascando los lados de vez en cuando, hasta que quede muy consistente. Extiende sobre la base de avena y utiliza una espátula para alisar la superficie. Déjalo reposar en el frigorífico durante 2 horas o hasta que quede firme.
  9. Para el topping de chocolate, pon el aceite de coco y el sirope de arce en un bol resistente al calor sobre un cazo con agua hirviendo a fuego lento (no dejes que el bol toque el agua).
  10. Cuando se haya derretido, añade el cacao en polvo y remueve constantemente durante 3 minutos o hasta que la mezcla quede lisa y espesa.
  11. Vierte el topping sobre el relleno. Alisa la superficie. Espolvorea unas pocas nueves y Sal Maldon por encima.
  12. Deja reposar en el frigorífico unas 6 horas o durante la noche.

La coliflor es una hortaliza que tiene múltiples propiedades nutricionales. Y es que la coliflor es rica en minerales, fibra, y vitaminas. Además, es una excelente fuente de antioxidantes y ayuda a proteger las células.

En esta receta te ayudaremos a preparar de manera muy sabrosa y diferente la coliflor asada que harán que todos los comensales queden fascinados con ella.

Modo de elaboración:

  1. Precalienta el horno a 180ºC, posición 4.
  2. Quita las hojas más grandes de la coliflor y sumérgelas por completo en una cacerola grande (o una olla) con agua hirviendo. Cuécelas durante 10 minutos. Sécalas.
  3. Mezcla el aceite, el curry en polvo, los copos de cayena y la Sal Maldon.
  4. Frota toda la coliflor con la mezcla.
  5. Métela en el horno y ásala durante 20 minutos.
  6. Emplata la coliflor con las almendras tostadas y los granos de granada, los albaricoques y espolvorea el tahini por encima. Añade una pizca de Sal Maldon y sirve.

La mezcla de ingredientes de esta ensalada, harán que sea tu nueva ensalada favorita. Y es que la combinación de la quinoa con los boniatos, el queso feta, las pecanas, cebolla roja y, por supuesto, con el toque especial de Sal Maldon, hace que sea una plato de primer nivel.

Método de elaboración:

  1. Precalienta el horno a 200ºC.
  2. Pela los boniatos, córtalos en trozos de 2 o 3 cm, mézclalos con el aceite de oliva y repártelos uniformemente en una bandeja de horno.
  3. Hornea los boniatos durante unos 20 a 25 minutos. Después de 10 minutos, remueve los boniatos y vuelve a meterlos en el horno. Ásalos hasta que estén tiernos y caramelizados.
  4. Mientras se asan los boniatos, cuece la quinoa siguiendo las instrucciones del paquete. Añade la pastilla de caldo al agua antes hervir la quinoa. Cuando estén hechos, apártalos para que se enfríen un poco.
  5. Lava y pica las verduras y la cebolla roja, pica las nueces y corta el queso feta en dados.
  6. Mezcla los ingredientes del aliño: aceite de oliva, vinagre de vino blanco y mostaza de Dijon.
  7. Mezcla los boniatos asados con la quinoa caliente y las verduras. Añade la cebolla roja, las pecanas y el queso feta. Vierte el aliño y mezcla suavemente para que se reparta bien. Termina con una pizca de Sal Maldon y pimienta.

Si quieres innovar y probar una ensalada diferente, esta receta es ideal para ti. Y es que la ensalada sueca se caracteriza por mezclar a la perfección alimentos muy nutritivos y con una gran variedad de sabores.

Sigue este paso a paso y disfruta de una ensalada que te encantará.

Método de elaboración:

  1. Pon el horno a 200ºC. Lava la remolacha. Corta un trozo grande de papel de aluminio y coloca todas las remolachas menos dos en el papel, rocía con un poco de aceite de oliva, 2 cucharadas de agua, sal y pimienta y envuelve las remolachas formando un paquete y colócalas en una bandeja de horno. Ásalas durante 35 minutos en el centro del horno. Abre el paquete y sigue horneando durante 25 minutos o hasta que la remolacha esté bien hecha.
  2. Mientras tanto prepara el resto de las remolachas, lávalas, pélalas y córtalas muy finamente, si tienes una mandolina será perfecta. Si utilizas remolachas de distintos colores, tendrás que encurtirlas por separado, ya que los colores se mezclan. Mezcla el agua, el vinagre, el azúcar y la sal y remueve hasta que se disuelva. Coloca las remolachas en un recipiente hermético y vierte la solución de encurtido. Deja reposar en el adobo durante al menos 25 minutos.
  3. Unta el pan de centeno con un poco de aceite de oliva y pica las nueces, hornea hasta que quede crujiente y las nueces estén doradas, aproximadamente 5 minutos.
  4. Lava y quita los nervios de las coles, y después córtalo en trozos de unos 4 cm. Ten preparada una cazuela con agua hirviendo con sal y escáldelo durante 3 minutos, después sumérgelo en agua helada. Escurre y exprime el exceso de agua, extiende las hojas y colócalas en un trozo de papel de cocina listas para saltear.
  5. En una sartén se añade un poco de aceite de oliva y se calienta a fuego fuerte, se añade la col kale y se sazona, se saltea durante un par de minutos.
  6. Vierte la leche en un cazo, caliéntala hasta el punto de ebullición y baja el fuego, desmenuza el queso de cabra en el cazo y bate enérgicamente.
  7. Con una cuchara, echa la crema de queso de cabra en el plato, corta la remolacha asada en cuartos o sextos, según el tamaño. Reparte por encima la crema de queso de cabra junto con la col kale y luego las rodajas de remolacha encurtida. Cubre con los crujientes de centeno y las nueces tostadas, y sirve caliente.

Hacer una preparación en escabeche tiene su truco. Por lo mismo, en este post te compartimos la receta de la reconocida chef Olia Hercules para preparar unos perfectos champiñones escabechados.

Y como en Sal Maldon nos encantan las recetas diferentes y únicas, lo que nos volvió fanáticos de la receta de Olia Hercules, es que los champiñones escabechados los combinó con coliflor morada para dar un gusto único.

Método de elaboración:

  1. Introduce las verduras (o los tallos, hojas y restos de verduras) en tarros. A continuación, calienta estos ingredientes en un cazo con agua para disolver la sal, y pruébalos: puede que quieras añadir más dulzor o más sal, ¡guíate por tus propias papilas gustativas! Viértelo sobre las verduras (tanto en caliente como a temperatura ambiente, pero si lo viertes en caliente se ablandarán un poco las verduras, lo que resulta ideal para la coliflor). Después se deja enfriar todo, se cierra la tapa y se guarda en la nevera.
  2. Los encurtidos se pueden comer tal cual o se pueden aprovechar para hacer una buena ensalada de invierno.

Las sales aromáticas para cocinar son perfectas para aumentar los sentidos de los comensales y transmitir un sabor diferente y único.

En esta receta te enseñamos cómo hacer una sal de lavanda para cocinar y poder incorporarla para dar un gusto diferente a las patatas, pollos, pescados, y mucho más.

Recuerda que puedes hacer muchísimos tipos de sales aromáticas con, por ejemplo, romero, albahaca, y menta, sólo hay que dejarse llevar por la creatividad y probar.

Método de elaboración:

Utiliza una parte de flores de lavanda por cada 10 partes de Sal Maldon. Las flores deben estar totalmente secas, de lo contrario se apelmazan con la sal. Muele todo junto en un mortero, o utiliza un molinillo de café limpio. Es perfecta para pescados, huevos y verduras de temporada.

Mucha gente piensa que hacer mermeladas es muy difícil, pero la verdad es que es muy fácil y duran mucho tiempo.

En esta receta te enseñamos el paso a paso de cómo hacer una mermelada de higos casera de manera sencilla y que estará lista en menos de 2 horas.

Una vez que hayas preparado esta mermelada, podrás disfrutarla de muchísimas maneras, por ejemplo, en una tostada, incluyéndola en un postre, como acompañamiento de un croissant, etc.

Método de elaboración:

  1. Coloca todos los ingredientes en una olla con un chorrito de agua fría.
  2. Mézclalos para combinarlos y déjalos hervir a fuego medio-bajo, removiendo constantemente durante 10 minutos.
  3. A continuación, tapa y deja cocer a fuego muy lento durante 1 hora removiendo de vez en cuando.
  4. Los higos se romperán y quedará una deliciosa mermelada con trozos de textura de la suave piel de los higos.
  5. Pasar la mermelada a tarros es un proceso un poco tedioso… pero merece la pena para que dure mucho tiempo y puedas seguir disfrutándola dentro de unos meses. Coloca los tarros de cristal en una bandeja y mételos en el horno a 130ºC (no lo pongas más caliente porque podrían romperse) y déjalos en el horno durante al menos 20 minutos. Con mucho cuidado, saca los tarros de uno en uno, con guantes de cocina, y colócalos sobre una superficie resistente al calor. Vierte la mezcla de mermelada caliente directamente en los tarros con la ayuda de una cuchara y cierra bien la tapa. Guarda tu mermelada en la despensa, una vez abierta guárdala en la nevera y consúmela en menos de 2 meses.